'Cuenta la leyenda...' de José Manuel Díaz Hidalgo
Cuenta la leyenda... que en un país no muy lejano, pero eso sí, hace mucho tiempo...una chica curso sus estudios de psicología en la universidad del castillo del reino. Pero también en aquella época había una tasa de paro muy elevada y no encontraba trabajo por ningún lado. Decidió tomarse unas vacaciones después de tantos años de estudio, así que... preparó su equipaje, montó en su caballo y se marchó galopando al condado de al lado. Después de varias horas de camino se notaba cansada, buscó un sitio para poder descansar. Divisó un bosque y al acercarse vio un letrero que ponía... "Bosque del estigma". Se fue adentrando en él y descubrió una casa con siete ventanas. Bajó de su caballo y picó a la puerta. Nadie contestaba pero al seguir golpeando notó que estaba abierta. Estaba tan cansada que se quedó dormida y en un plis-plas pasaron varias horas. Al despertarse empezó a escuchar voces y al abrir los ojos, se sintió observada por siete chicos que la miraban fijamente. Uno de ellos le dijo, no te preocupes, suelen ser síntomas de "esquizofrenia", pero con la medicación se sobrellevan. Empezaron a hacer la comida, en la cocina había uno que lo hacía todo, no paraba quieto. Ella le insinuó que si le ayudaba pero él le dijo que era por su "TDAH". Ella no tenía mucha hambre y otro chico le preguntó qué si le pasaba lo mismo que a él, que comía poco porque al mirarse al espejo se veía obeso y sin embargo estaba muy delgado. Padecía "anorexia". Poco a poco los fue conociendo a todos. Le subió la comida al chico que no quería salir de su habitación porque estaba de bajón por su "depresión", al que no paraba de asegurarse si estaban todas las puertas bien cerradas y volvía a abrirlas una y otra vez por su "TOC". También al que decía que compraría todas las aldeas y todos los condados del reino, que quería ser rey y todo era por su estado de euforia ya que padecía un "trastorno bipolar". El último que quedaba le dijo que aunque lo viera muy tranquilo tocando su guitarra... también tenía lo suyo, padecía un "TLP" y que tenía fases de varias enfermedades. Ella les dijo que les estaba muy agradecida por todo y lo que había aprendido le iría de maravilla para encontrar trabajo. Se miraron los siete y dijeron:
- Estás en paro y en nuestro club social del condado de al lado tenemos una plaza vacante, vamos corriendo todos juntos a dejar tu currículum, ea...
Y marcharon cantando "aiho, aiho, vamos al club social, tarara tata aiho, aiho..."
Dedicado al Club Social la Llum por su 10º aniversario.